La aventura de La Salud Archena en la fase de ascenso terminó este fin de semana tras caer con contundencia ante un Melilla superior en el tramo final del partido. El conjunto murciano, que el año pasado lograba un ascenso a esta categoría, se despidió de la temporada con la cabeza alta tras firmar un curso espectacular que casi lo lleva a la antesala de la Primera FEB.
El encuentro comenzó con imprecisiones por parte de ambos equipos. Yeikson Montero destacaba en los primeros minutos con 5 puntos que adelantaron a Archena, aunque un par de pérdidas suyas dieron alas a Melilla. La presión defensiva de los locales fue asfixiante en este tramo, permitiéndoles un parcial de 11-1 que rompió la igualdad inicial y cerró el primer cuarto 25-17.
El segundo cuarto arrancó con un triple de Bouzán y un 2+1 de Toni Ferragut que acercaron a los murcianos (25-22), y un posterior parcial les permitió incluso ponerse por delante (28-30). Sin embargo, Melilla reaccionó con una racha de 13-0 liderada por Pavlov y Krutous, que dejó a Archena contra las cuerdas (41-30). A pesar de un gran final de cuarto, con canastas de Hurtado y un triple sobre la bocina de Montero, el marcador al descanso reflejaba un 43-36 favorable a los locales.
En el tercer cuarto, Archena apretó en defensa y destacó el trabajo interior de Fabián Flores, que llevó al rival al bonus a mitad de cuarto. Mendiola mantuvo viva la ofensiva murciana con 14 puntos al final del mismo, aunque no bastó para dar la vuelta al marcador. Melilla supo contener las acometidas de su rival y cerró el tercer acto 62-57.
El último cuarto fue definitivo. En apenas dos minutos, Melilla volvió a despegarse con un parcial impulsado por Pavlov en el poste y el acierto exterior (71-60). Archena empezó a fallar canastas cerca del aro y el conjunto norteafricano no perdonó. La diferencia se amplió hasta los 14 puntos, y aunque Flores respondió con un 2+1, una polémica marcó el desenlace. Lo que pudo ser una falta favorable a Archena, terminó en una técnica al entrenador Pedro Hermógenes, y un triple concedido entre protestas y decisiones controvertidas al mismo tiempo que la técnica que terminaron de romper el partido.
La situación desembocó en la expulsión de Hermógenes y Yeikson Montero, dejando a Archena completamente descolocado y sin opciones de remontada. Un Melilla a 18 puntos, a falta de 1:30, aprovechó el desorden para cerrar el partido con autoridad y sellar el pase con un claro 97-67, con 13 puntos concedidos a falta de poco más de un minuto por un Archena que ya bajó los brazos sin opciones.
Pese al resultado, que no reflejó este disputado encuentro, La Salud Archena despide una temporada inolvidable. Un equipo humilde, ubicado geográficamente muy lejos del resto del grupo oeste, que se plantó entre los mejores gracias a un proyecto deportivo serio, una plantilla luchadora y una afición incansable. Su sueño del ascenso terminó, pero esta temporada dejan una huella imborrable.